Los orígenes de Hamás y las Brigadas Ezzeldin Al-Qassam

25.01.2024

Para comprender de qué manera Hamás se presenta en el "conflicto" palestino-israelí se puede definir con la siguiente frase: "El Islam es la solución". Hamás ha reivindicado la lucha armada para "expulsar a todos los judíos" del actual territorio de Israel y Palestina, desde la Franja de Gaza hasta el Jordán, aunque ha ido cambiando este discurso hacia una solución que vuelva a las fronteras de 1967, sin abandonar las acciones militares y terroristas en territorio israelí. Es importante esta última mención de que sus acciones han sido dirigidas contra territorio israelí y ocupado por Israel y no parecen orientarse hacia una lucha armada fuera de esas zonas. El movimiento Hamás es tanto islamista como nacionalista, con especial énfasis en este último. De hecho, Hamás se ha enfrentado a militantes de Al-Qaeda en Gaza especialmente en 2009 y ha tenido importantes desacuerdos verbales con la organización terrorista porque según estos últimos, los medios políticos no han de emplearse, sino la "guerra santa" como único camino.

Se puede considerar el "padre" de Hamás a la "Hermandad Musulmana" fundada en Egipto en 1928. Desde ese momento ya se instaba a frenar los movimientos políticos seculares inspirados por Occidente en Oriente Próximo. El cofundador y líder de Hamás fue Ahmed Yasín, el cuál nació en la actual ciudad israelí de Ashkelon, aunque vivió gran parte de su vida en un campamento de refugiados en Gaza hasta ser asesinado en 2004 por el ejército israelí.

Se cree que Hamás, pese a estar dentro del marco ideológico de la Hermandad Musulmana, siempre ha actuado con más libertad que otros movimientos subyugados a la organización islamista sunita por actuar bajo la ocupación israelí.


Si bien es cierto que los movimientos islamistas comenzaron ya a cobrar gran importancia especialmente a raíz de la "Guerra de los Seis Días" de 1967, este movimiento político tiene sus antecedentes modernos en 1987 a partir de la Primera Intifada tras 20 años de ocupación israelí. Fue en este momento cuando Hamás se adjudicó la Intifada a su nombre, en contra de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), la cuál se mantuvo al principio al margen de este levantamiento. De hecho, la OLP era un movimiento secular que por lo tanto no se basaba en el Islam para "solucionar" el conflicto, con lo que Hamás comenzaría a disputarse con esta el poder en Palestina.

Cabe destacar que Hamás ascendió al poder en la Franja de Gaza en 2006 tras unas elecciones que la UE afirmó que se "respetaron las normas internacionales". Así, Fatah quedó relegado su poder en Cisjordania hasta día de hoy, aunque con cada vez más descrédito en la sociedad palestina. El descenso de la popularidad de la OLP se dio especialmente tras la muerte de Yasir Arafat que implicó luchas internas y especialmente sonados casos de corrupción que afectaron negativamente a la percepción de los palestinos a este movimiento.


Si bien en Occidente se ha relacionado a Hamás con su ala militar (Brigadas Ezzeldin Al-Qassam), desde antes de 1987, la organización palestina comenzaba a actuar como una especie de "estado paralelo" a la Autoridad Palestina (AP), suministrando bienes y servicios a los palestinos, ya fuera alimentos, suministros médicos, guarderías y otros servicios sociales que fueron atrayendo cada vez más población a su causa.

Especialmente es destacable que antes de su formación, Ahmed Yasín fue estableciendo una red de base de organizaciones culturales y sociales para islamizar la sociedad palestina, antes de comenzar con la "resistencia" armada. De hecho, desde Israel se veía con beneplácito en algunos sectores que la incipiente Hamás amenazara el control que por entonces tenía la OLP de Arafat, posiblemente siguiendo el concepto de "divide y vencerás".

Varios analistas consideran que la evolución de Hamás puede dividirse en tres etapas:

La primera de ellas entre 1970 y 1980, cuando se pretende islamizar la sociedad palestina.    La siguiente fase fue una preparación militar para la Primera Intifada y por último una evolución hacia un doble movimiento, tanto político como militar para ganar las elecciones de 2006.

Hamás fue ganando adeptos sobre todo tras comprobar que los acuerdos alcanzados en el principio de la década del 90 por la OLP e Israel se estancaron, la expansión de los asentamientos israelíes continuaba y que no se había logrado la creación de un Estado Palestino.

El psiquiatra palestino, Eyad Sarraj, consideraba que la gente de Hamás son "ideólogos", es decir, creen tener una misión, que es la de sumar "buenos musulmanes" a la creación de la nación islámica, con lo que inevitablemente vendría de la mano de los sentimientos culturales e históricos del Islam. En este sentido, el psiquiatra explicaba que los musulmanes "han sufrido un fracaso crónico durante los últimos 1.000 años, desde que perdieron Andalucía."

Hamás ha aglutinado estos sentimientos de forma "paciente" en el colectivo palestino, escuchándose declaraciones de altos cargos de la organización de temas históricos para mostrar el tiempo al que estarían dispuestos a esperar para lograr sus objetivos. Como ejemplo está la declaración del cofundador de Hamás, Aziz ar-Rantisi: "El rey David tenía un estado en esta zona hace 3.000 años. ¿Durante 3.000 años hasta ahora alguna vez dijeron (los israelíes) que no era su tierra, aunque no la tenían? Pero a lo largo de 3.000 años vivieron adaptándose y viviendo con la realidad allí". Una frase más directa fue enunciada por el que fue un negociador de Gaza: "El mundo tiene prisa. Nosotros no tenemos prisa".


El brazo armado de Hamás 



El brazo armado de Hamás denominado Brigadas de Ezzeldin Al-Qassam, toma el nombre del que fue el clérigo e influyente sunita sirio Izzedin al-Qassam. Después de formarse en la prestigiosa universidad islámica de al-Azhar en el Cairo durante la rebelión contra la ocupación británica, llegó a Siria e hizo de predicador, comenzando a atraer a pequeños grupos de combatientes que planeaban enfrentarse a la potencia colonial de aquel momento que era Francia. Tras su huida de Siria en la década de 1920 al llamar la atención de la potencia colonizadora, se asentó en Haifa (actual ciudad controlada por Israel). Allí, Qassam fue captando un gran número de seguidores palestinos, con la idea de que era necesario reformar el Islam para organizar una "resistencia" para defender Palestina de la llegada de judíos bajo el mandato británico. Qassam fue aglutinando miles de seguidores en la Mezquita de Haifa, realizó programas de alfabetización para los pobres, enseñó el Corán, impartía clases… Llegó a ser registrador de matrimonios musulmanes de Haifa, lo que le dio la oportunidad de reunirse con líderes palestinos de otros pueblos y aldeas. Fue en esas reuniones cuando fue expandiendo la idea de que la "Yihad" era necesaria para combatir a los colonos y a los británicos. Aprovechando las condiciones económicas totalmente desiguales entre los palestinos y los colonos judíos que llegaban, Qassam introducía la agenda del Islam, no era una simple lucha laboral como sucedió entre 1920 y 1930. Además Qassam se enfrentó dialécticamente a los líderes árabes de Palestina que no eran capaces de "desafiar" los planes británicos.

Fue en la década de 1930 cuando Qassam llevó estos sermones a la lucha armada, formando la que se conocía como la "Mano Negra" que fue integrada generalmente por campesinos pobres que fueron entrenados en el manejo de armas. Así durante 5 años realizaron ataques contra los asentamientos judíos en el norte de Palestina, llegando a matar agentes de policía. Qassam murió en noviembre de 1935, mismo mes que declaró la yihad. Este con once seguidores combatió contra las fuerzas británicas y murió en el distrito de Yenín, en la actual Cisjordania. Su muerte provocó la ira de miles de palestinos y se declaró huelga general en Haifa y alentó la rebelión palestina de 1936-1939 . Esta figura ha resultado clave en el concepto de mártir y de inspiración para todas las facciones de la "resistencia palestina".


Brigadas Ezzeldin Al-Qassam



Los orígenes de la actividad del brazo armado de Hamás se remontan a la década de 1980, con la Primera Intifada. En 1984, el jeque Áhmed Yasín formó el "embrión" de estas brigadas que se denominó los "al-Mujahidoun al- Filistinioun" o más conocidos como los "combatientes palestinos". Este grupo que contaba al principio con poco armamento, estaba supuestamente supervisado "personalmente" por Yasín y trataba de obtener las armas a través del mercado negro israelí aunque de forma poco exitosa, llegando las autoridades de Israel a detener a varios de los integrantes. Veteranos militantes de Gaza comentaron que los fusiles M16 fueron adquiridos por 10.000 dólares la unidad y el único lanzacohetes que tenían por 24.000 dólares. Algunas de las armas adquiridas fueron saboteadas por los israelíes previamente o su funcionamiento no era el correcto. El propio Yasín fue detenido y condenado a 13 años de prisión por Israel, aunque liberado a los 11 meses, tras lo cual volvió a crear una nueva organización armada llamada al-Majd que fue dirigida por Yihyeh Sinwar y Rawhi Mushtaha. Este grupo inició sus operaciones en 1986 y 1987, poco antes de la Primera Intifada.

Fue en el año 1991 cuando las distintas células armadas que integraban Hamás se fueron congregando en torno a las Brigadas Ezzeldin Al-Qassam. Estaban lideradas por Sheikh Salah Shehadeh, que vivía en la Franja de Gaza y era un ex activista de los Hermanos Musulmanes. Mientras estudiaba en Alejandría, Egipto, ya mostraba tendencias islamistas y era bastante carismático y un "militar hasta la médula" dicen desde el que fuera su círculo cercano.

Desde un primer momento, las Brigadas Ezzeldin Al-Qassam se mostraron muy contundentes con los "colaboradores" del régimen israelí. De hecho, en 1992, Hamás asesinó a más de 150 supuestos colaboradores, algunos de ellos inocentes. Los líderes de Hamás identificaban a cinco tipos de colaboradores: ideológicos, políticos, económicos, morales y de seguridad que eran reclutados por Tel Aviv para conseguir información del interior de la organización palestina.

No es desdeñable que algunos palestinos temieran más a las milicias palestinas que buscaban "colaboradores" para asesinarlos, que incluso a algunos soldados israelíes, cosa que hizo que gran parte de la sociedad palestina aceptara los Acuerdos de Oslo y la "esperanza" de la llegada de la OLP.


Tras establecerse en Gaza, militantes de Hamás comenzaron a activar sus células en Cisjordania, especialmente atrayendo a jóvenes universitarios.

El jeque Saleh al-Aroun fue el fundador de las Brigadas Al-Qassam en Cisjordania, donde se fue expandiendo de forma importante debido a que proporcionaban a los palestinos descontentos con la ocupación la oportunidad de tener armas para dejar las protestas y pasar a las acciones militares/terroristas. Una vez fueron captados muchos palestinos de toda Cisjordania incluida Jerusalén, se comenzaba a "glorificar" a los militantes de Qassam como "defensores del pueblo palestino" contra la represión israelí, utilizando para ello todas las herramientas de retórica pública y medios de comunicación para así hacer frente a la dominante OLP de Arafat. En este sentido, el ala militar de Hamás hizo cuanto pudo para socavar el proceso de paz desde Madrid hasta a Oslo con una serie de ataques contra soldados, colonos y civiles.


Tras la masacre de Hebrón de 1994 cometida por un colono israelí, las Brigadas Al-Qassam llevaron a cabo el primer atentado suicida con un joven de 19 años que mató a ocho soldados israelíes. Hasta ese momento no era la práctica que Hamás quería llevar como forma de "resistencia" tras varios intentos fallidos en años anteriores. Sin embargo, a partir de ese momento se dieron cuenta que de esa manera podían golpear los territorios ocupados con mayor facilidad y capacidad de destrucción. Tras llevarse a cabo atentados de este tipo, las autoridades israelíes se vieron obligadas a repensar su estrategia contra Palestina y los militantes de Hamás. Desde dentro de la organización veían estas acciones como una forma de demostrar que ellos también tenían la capacidad de matar y dañar a la población israelí. Algunos eruditos islámicos no veían estas acciones como la forma correcta de ejercer la resistencia, por ser contrario al Islam, aunque otros clérigos si que lo consideraron como una forma aceptable por ser una "tierra musulmana ocupada".

Una vez que Hamás ganó las elecciones de 2006 y ya las tropas israelíes no se encontraban desplegadas en la Franja de Gaza, Hamás se mostró como el vencedor de esa retirada y ya podían moverse con libertad por toda la Franja, al igual que las otras milicias armadas como la YIP. A partir de ese momento, y debido a que era más complejo realizar atentados con bomba de la misma forma que años antes, Al-Qassam optó por usar otras vías para ejercer lo que ellos denominan como la "resistencia". Así, comenzaron a fabricar en talleres clandestinos de Gaza cohetes y proyectiles de mortero, que usarían para atacar como vemos hoy, principalmente a los asentamientos israelíes cercanos a la Franja como Ashdod o Ashkelon. La mayor facilidad para fabricar estos cohetes deriva de la retirada israelí, ya que en ese momento era más sencillo el contrabando de armas desde Egipto cuando no existían puestos de control israelíes y se extendían las redes de túneles tan famosas hoy en día.


De esta forma, y hasta día de hoy, tanto el armamento fabricado de forma artesanal como el importado de otras zonas, ha ido mejorando cualitativamente, así como el entrenamiento de sus militantes de la mano de las milicias de Irán en la región.

Armamento de Ezzeldin Al-Qassam


Tampoco debemos olvidar el uso de drones kamikaze y otro tipo de drones FPV en la Guerra de Sucot por parte del grupo armado palestino, así como el uso de paramotores para lanzar el ataque terrorista sorpresa del 7 de octubre.

Carlos Martínez 

EQUIPO ENTRE GUERRAS 

Bibliografía y consultas:

Hamas: The Islamic Resistance Movement. Beverley Milton-Edwards & Stephen Farrel. 2010

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